Inteligencia Artificial (IA) y Coaching, ¿tienen sentido en la misma frase?

Últimamente, quizá porque tenga el foco en ello, están llegando a mis manos diferentes artículos y noticias sobre AI y Coaching. El que más me ha sorprendido ha sido un artículo en el que una Startup española hablaba sobre como estaban planteándose procesos de Coaching en el que el Coach fuese una IA, una especie de “chatbot” Coach, algo que me ha llamado tremendamente la atención y lo que me ha motivado a escribir este artículo.

Llevo muchos años en Tecnología, en mis comienzos en la parte técnica, desarrollando software, posteriormente desde la parte de gestión y relacionado con marcos de buenas prácticas, y en la actualidad más como apasionado que como profesional de la misma. Llevo, también, oyendo hablar de IA desde que comencé en este mundo de la tecnología, cuando para distinguir a un ser humano de una máquina (IA) tan sólo había un “test” aceptado a nivel mundial, el test de Turing. Entonces, aparentemente, era mucho más sencillo detectar la IA, el impostor de la Inteligencia Humana.

¿En qué punto estamos actualmente con la IA?

La gran diferencia entre el estado de la IA de hace 40 años y la de ahora es, además de la propia evolución de la tecnología especifica de IA, la potencia de cálculo de los actuales “ordenadores”, y podríamos incluir en esta clasificación de “ordenadores” a todo aquello que tenga una CPU y por lo tanto capacidad de procesar cálculos, que es lo que realmente, en su función más pegada al “chip”, hace un ordenador.

Los chips y su capacidad de cálculo han evolucionado tanto, que, si comparamos un Smartphone actual de gama baja con un PC de hace 40 años de gama media, el espacio que ocupa un Smartphone es 100 veces menor, mientras que la potencia de cálculo es, sin duda, de varias órdenes de magnitud superior (del smartphone sobre el PC de hace 40 años).

Por lo tanto, lo que hemos conseguido en estos años es que las CPUs aumenten su potencia de cálculo extraordinariamente, y recordemos que el punto fuerte de un ordenador/smartphone/chip/CPU/llámalo x, es precisamente eso, que es capaz de hacer cálculos mucho más rápido y de manera más eficiente que nuestro cerebro.

Sin embargo, el cerebro humano, por su complejidad, y gracias, entre otras cosas, a las redes neuronales es mucho más eficiente en otras tareas, y de momento también tiene la exclusiva en algunas de ellas como nuestro sistema emocional (inteligencia emocional), nuestra intuición, nuestra capacidad de empatizar … en general yo lo resumiría con todo lo relacionado con nuestro cerebro reptiliano y nuestro cerebro límbico.

Curiosamente, o no tan curiosamente, la IA está basada en el concepto de Redes Neuronales, que como seguramente estás intuyendo (algo que ocurre fundamentalmente en la amígdala, parte del cerebro reptiliano, y de manera inconsciente) está inspirado en cómo funciona nuestro sistema neurológico, según como la ciencia lo ha descrito, y está aceptado hasta que no se demuestre lo contrario. Pequeñas unidades (neuronas) que se conectan y forman redes neuronales.

Por lo tanto, si, podríamos decir que la IA es una réplica “sintética” de nuestro cerebro, pero yo me atrevería a decir que, de la capa más moderna del cerebro humano, el neocórtex, analítico, lógico y plenamente consciente.

Si unimos una potencia de cálculo extraordinariamente grande, con una réplica perfecta del funcionamiento del cerebro humano, tenemos una tecnología que da el pego más que aceptablemente … con respecto al neocórtex, pero de momento prácticamente nula en lo que se refiere al cerebro límbico y el reptiliano. La neurociencia aún no es capaz de explicar muchas cosas que pasan en nuestro cerebro, lo que evidentemente significa que si no somos capaces de explicarnos difícilmente seremos capaces de reproducirlas.

Ponte una alerta, la que sea, hazte un nudo en la corbata, cámbiate el reloj de mano, píntate en el dorso de tu mano algún símbolo .. lo que sea … cuando la computación cuántica sea más común y se democratice, la potencia de cálculo de las CPUs se volverá a multiplicar por varías órdenes de magnitud, y te pongo un ejemplo: Para descubrir una contraseña con la técnica de la fuerza bruta (ir probando combinaciones una tras otra hasta encontrar la buena) una CPU actual, dependiendo de la contraseña (su longitud y composición), puede tardar varios años, un ordenador cuántico lo hará en un par de días. ¿Puedes intuir, de nuevo, lo que ocurrirá con la IA en ese momento?

¿Qué es el Coaching?

Para no poner mi mapa y ser lo más neutro posible usaré dos definiciones de Coaching aceptadas internacionalmente.

Una es la de la ICF (International Coaching Federation) coaching es:

Proceso de acompañamiento reflexivo y creativo con clientes que les inspira a maximizar su potencial personal y profesional.

La segunda de John Whitmore (padre del Coaching europeo):

Liberar el potencial de una persona para incrementar al máximo su desempeño. Ayudarle a aprender en lugar de enseñarle.

En ambos casos parece claro que el “objeto” del proceso, el coachee, es una persona, en ningún caso, por el momento, se menciona que el Coach deba serlo también. Es decir, técnicamente una IA podría ser Coach, y se puede deducir que podría, por lo tanto, estar certificada, al menos por la ICF. Aunque en la práctica y conociendo el proceso de certificación, lo veo muy difícil.

Coaching, desde el punto de vista del Coach, es poner a disposición del coachee todos los conocimientos en diferentes ámbitos, algo fácil una para una IA, pero también tener presencia y escucha activa, establecer “rapport” (técnica que crea una conexión de empatía con otra persona, para que se comunique con menos resistencia), indagar entre otras cosas en las emociones, los valores, las identidades del coachee, detectar cambios en la energía del coachee, escuchar lo que el coachee dice, pero también lo que no dice, y aquí entra en juego la intuición, haciendo uso de esa intuición siempre en beneficio del coachee .. y muchas otras cosas que ocurren en las sesiones de Coaching y que tienen como fin que el coachee sea consciente de lo que no está viendo desde su posición y que de alguna manera le está suponiendo un obstáculo para avanzar. “Ampliar su mapa”, para que encuentre las soluciones, los caminos hacia lo que desea conseguir … que ya están él/ella.

Y sobre todo, Coaching es una práctica NO DIRECTIVA, todo lo que ocurre en las sesiones es decisión del coachee, el Coach no toma decisiones, más allá de las puramente técnicas y siempre en beneficio del coachee y previa consulta con el coachee sobre cuestiones, herramientas, “intuiciones”, etc.. para que sea el coachee el que valide y decida qué hacer con eso que el Coach esta alumbrando.

¿Usos de la IA relacionados con Coaching?

Si tomamos las “sesiones” de Coaching como elemento central para integrar la IA en los procesos de Coaching, solo habría dos momentos en los que se puede hacer uso de la misma:

  • Fuera de la sesión de Coaching
  • Durante la sesión de Coaching

El Coaching tiene lugar, esencialmente, durante las sesiones de Coaching, es decir cuando interactúan Coach y Coachee con el objetivo de que el segundo descubra elementos que no estaba contemplando, y el primero le “ayude a aprender, no enseñe” al coachee. Por lo tanto, fuera de las sesiones de Coaching la integración de IA puede tener sentido para que el Coach la use a modo de “asistente”, por ejemplo, para:

  • El trabajo que requiere de mucha potencia de cálculo, como revisar la conversación de sesiones pasadas, ayudar a detectar, y de esa manera entender, patrones en el coachee, y como mucho identificar herramientas, para que el Coach las “prepare” y las tenga más accesibles en caso de que encuentre el momento de proponer su uso en futuras sesiones.
  • Preparar para el Coach resúmenes de lo tratado en las sesiones anteriores, y de esa manera ayudar a refrescar las conversaciones que tuvieron lugar en dichas sesiones.

Durante las sesiones de Coaching, si el Coach está pendiente de lo que la IA pueda ir indicándole, perdería presencia y escucha activa, y con ello el hilo de la conversación, impidiendo que se genera un contexto de confianza y seguridad para el coachee, lo que necesariamente nos coloca en la situación de sustituir al humano por la máquina, motivo que, como decía en la introducción, ha provocado que escriba este artículo.

Sesiones Coachee – Coach IA.

Por la exposición de conceptos que he dado en puntos anteriores, supongo que intuyes que desde mi comprensión, desde mi mapa, una sesión donde un coachee mantenga una conversión con un Coach no humano, un Coach IA, no es posible con el estado del arte actual de la IA, y no creo que lo pueda ser en un futuro, al menos cercano.

Esto lo veo así, no solo para el Coaching, cualquier otra profesión en la que las emociones, la intuición, la empatía, la conexión … y en general todo lo que ocurre en nuestro cerebro límbico y reptiliano, tenga una importancia esencial, sea parte nuclear de la relación, Coach-coachee, Terapeuta-Paciente, difícilmente va a ser factible que la AI sustituya al humano por la máquina.

Podemos encontrar razones comerciales de todos los tipos:

  • “Democratizar” el acceso al Coaching
  • “Innovar” aplicando nuevas tecnologías
  • etc…

pero entonces estaremos vendiendo, y comprando otra cosa diferente, que no es COACHING, y esto será así mientras las definiciones actuales de Coaching sean las que son, y las competencias definidas por los diferentes organismos certificadores, cuyo máximo exponente internacional es la ICF, sean las que son. Si como parte de un proceso de innovación, cualquiera de estos dos elementos, definición y competencias, son actualizadas, entonces tendré que revisar este artículo.

Como conclusión, el cerebro humano está aun muy lejos de ser entendido por completo, a pesar de que la Neurociencia ha dado pasos de gigante en las últimas décadas, y por ello intentar reproducir el funcionamiento de algo que no se entiende, es una tarea muy complicada. La potencia de cálculo de los ordenadores se ha multiplicado exponencialmente en las últimas décadas, y los avances en este sentido que la computación cuántica va a introducir son extraordinarios pero, aún así, como rezaba un anuncio de hace ya algunos años “la potencia sin control no sirve de nada”. El Coaching, por el momento, y debido a la propia definición del mismo y a las competencias aceptadas internacionalmente es una cuestión entre humanos, si bien la IA puede ser un buen asistente para todo lo que ocurre fuera del “Coaching”.

Consideraciones legales y éticas

Por último, no quiero dejar pasar cuestiones que también están muy de moda en estos momentos, y que te dejo aquí para que reflexiones:

Hace ya algunos años, cuando esto de la IA no está en el punto que está hoy en día, hablando sobre la IA, un cliente durante una comida me recomendó ver la película HER , ¿la has visto? ¿Qué suscita en ti?

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